Hay 2 tipos de huéspedes: los que quieren saber a qué hora empieza el desayuno del hotel y los que preguntan a qué hora termina.

Eso sí, tanto en el primer caso como en el segundo, les importa la calidad y la variedad del desayuno.

Dado que las opiniones online sobre el desayuno del hotel son uno de los elementos más importantes para la reputación online del establecimiento, a los hoteleros les interesa asegurarse de que el suyo deje a los huéspedes saciados y satisfechos, empezando por los 5 elementos más demandados en el desayuno del hotel, que le presentamos a continuación.

#1 Café y té de gran calidad

Ningún desayuno está completo sin la calidez (y la carga de cafeína) que proporciona una taza de café o té, según las preferencias de cada huésped.

Quizá la oferta más básica e internacional para el desayuno del hotel consista en servir un café o té de calidad excepcional tan pronto como los huéspedes se han sentado. Las bebidas calientes con cafeína, ya se trate de un cremoso capuchino o un fragante Earl Grey, suelen ser lo primero que quieren (¡y esperan!) los huéspedes del hotel antes incluso de plantearse qué comer.

#2 Opciones para recargar carbohidratos y satisfacer a los huéspedes

Desde tiernas tortitas hasta cruasanes hojaldrados, pasando por bollos de mantequilla, panecillos rellenos, roscas de pan recién horneadas o baguettes crujientes, los alimentos ricos en carbohidratos suelen encontrarse entre los elementos más deseados de cualquier desayuno del hotel, en cualquier país.

Los huéspedes recibirán con agrado una interesante variedad de panes, ya que el pan les ayuda a quedar saciados y satisfacer el antojo de carbohidratos matutino.

Por eso, cuando diseñe el desayuno del hotel perfecto, piense en alimentos consistentes, integrales, tiernos, hojaldrados… Opte por los productos recién horneados, tostados o (si desea preparar bagels) cocidos. Claro que también puede incluir avena, pero no deje olvidada a esa gran mayoría de huéspedes que desea carbohidratos.

#3 Proteínas con más proteínas de acompañamiento

Nada prepara mejor para un día de turismo, reuniones de negocios o viajes que un buen plato de alimentos ricos en proteínas.

Aunque el beicon y los huevos revueltos sean clásicos en el desayuno del hotel, no se limite a estos elementos. Según la ubicación del hotel, los embutidos y el queso podrían ser una opción más adecuada, incluso el yogur griego o de sabores.

Y no pasemos por alto las numerosas formas que hay de servir los huevos: fritos, cocidos, en tortilla…

#4 Fruta: llamativa, colorida y variada

Para equilibrar un desayuno contundente y compensar la presencia de alimentos salados, o bien como una alternativa más ligera y dulce, nada mejor que la fruta. En abundancia y variedad.

Dulce o agria, fresca o en conserva, sola o con cereales, en yogur o en tostadas, la fruta colorea tanto el sabor como el aspecto del desayuno del hotel. Y, por supuesto, resulta muy saludable y agradable, por lo que no puede faltar en la mesa.

Desde las clásicas frutas de temporada hasta las más exóticas, esta idea dejará satisfechos a los huéspedes y hará que sus mañanas resulten más… fructíferas.

#5 Desayuno del hotel tradicional

Un toque de sabor local marca la diferencia en la primera comida del día.

Ya se trate de un buen chocolate con churros o ensaimadas en España, beicon con huevos en Reino Unido, masala dosa en la el sur de la India o tiernos bretzel con salchichas en Baviera, el desayuno del hotel representa una excelente oportunidad para que los huéspedes entren en contacto con la cultura gastronómica del lugar.

Mediante un desayuno tradicional de la localidad, la región o el país correspondientes, el hotel aporta a los huéspedes una experiencia culinaria única, así como un gran comienzo de la jornada.

Desde la más pura sencillez hasta una auténtica experiencia gourmet de lujo, un desayuno del hotel de calidad puede aumentar considerablemente el valor de la estancia hotelera y el nivel de satisfacción general de los huéspedes. Asimismo, puede mejorar la reputación online del establecimiento e incentivar las reservas de los viajeros.