Argentina
2 de septiembre de 2014
En la industria hotelera la utilización del color tiene mucha importancia, ya que crea factores de atracción, aspecto y confort.
Los colores cálidos se usan en las habitaciones que reciben la luz natural del Sur y Oeste, y los fríos en las muy soleadas o con luz del Norte y Este. Usualmente los colores de la pared que se emplean son de un tono medio con tendencia clara y ligeramente agrisados.
El gris perla es un buen color para habitaciones y puede ser complementado pintando alguna pared de fondo con verde, verde-azul, azul o pardo en los cuartos que tengan mucha luz; o con crema, amarillo, rosa o gamuza en el caso de las oscuras.
El mobiliario, cortinas y alfombras deberán ser de colores que contrasten con los de las paredes: cálidos si éstas son frías, o viceversa.
Es recomendable que las cocinas y servicios del restaurante tengan un acabado en blanco. En los corredores o pasillos oscuros utiliza el amarillo, rosa o melocotón en tonos intensos; en los muy iluminados puedes utilizar acabados tipo gamuza o un pardo cálido.
Baños, vestidores y espacios para el personal
En los baños y vestidores son utilizados los colores cálidos como el rosa o durazno.
Los espacios dedicados al personal deben ser resueltos siguiendo la psicología del color, utilizando aquellos alegres y utilizando una buena iluminación, para influir en el estado de ánimo.
El comedor y bar deberán tener una luz suave y en las mesas una lámpara incandescente que produzca una sensación de intimidad y ambiente acogedor. En tanto los pasillos, salas de baile y grandes espacios requieren de iluminación intensa.
Como podrás darte cuenta, los hoteles requieren de grandes adecuaciones de color para brinda a cada unos de sus espacios, el toque ideal. Aquí te damos algunas recomendaciones para que uses la que más te convenga.