En Península Valdés, frente a las costas del Golfo Nuevo, se inauguró oficialmente Rayentray Puerto Pirámides, un hotel que propone una experiencia de alojamiento de alta gama con compromiso ambiental y vistas privilegiadas al mar. La apertura marca un hito para la oferta turística de la región, reconocida a nivel mundial por ser uno de los puntos más relevantes para el avistaje de ballenas.

El establecimiento se ubica en un enclave estratégico dentro del área natural protegida, y está diseñado para integrarse con su entorno sin dejar de ofrecer todos los servicios de un hotel de primer nivel. Cuenta con doce habitaciones, todas con vista al mar, lo que refuerza la idea de exclusividad y contacto directo con la naturaleza.

Las suites están diseñadas con un enfoque moderno y cuidadoso, priorizando la comodidad, la amplitud y la conexión visual con el paisaje. Entre ellas, destacan las suites dobles panorámicas, especialmente orientadas para contemplar el Golfo Nuevo desde un punto privilegiado.

Uno de los aspectos distintivos del proyecto es su infraestructura pensada desde la sustentabilidad. Rayentray Puerto Pirámides cuenta con un parque solar de casi 17 kw que abastece entre el 30 y 70% de su demanda eléctrica, dependiendo de la radiación solar anual. Esta fuente renovable fue habilitada en diciembre de 2023 y ya genera excedentes que se inyectan gratuitamente a la red local.

Desde su fase de obra, el hotel ha evitado la emisión de 1.400 kilogramos de dióxido de carbono, colaborando así con la descarbonización de la atmósfera. Además, su sistema de sincronismo cumple con la normativa nacional de generación distribuida y fue desarrollado por un instalador calificado por la Secretaría de Energía de la Nación.

La eficiencia en el uso de recursos no se limita a la energía: también se ha invertido en tecnologías de gestión de agua y tratamiento de efluentes que minimizan el impacto ambiental. Esta responsabilidad ecológica resulta fundamental por la ubicación del hotel dentro de una zona declarada patrimonio de la humanidad por la UNESCO.

El hotel ofrece también un restaurante con capacidad para 70 personas, con un menú basado en productos locales y platos autóctonos. Este espacio gastronómico, con vista plena a la costa, busca convertirse en un atractivo tanto para los huéspedes como para visitantes ocasionales.

En la planta baja funciona la empresa Hydro Sport, especializada en excursiones náuticas y avistaje de ballenas. Su presencia facilita el acceso de los visitantes a uno de los principales atractivos de Península Valdés: el encuentro cercano con la Ballena Franca Austral, que cada año elige estas aguas para su reproducción.

Rayentray Puerto Pirámides se presenta como mucho más que un hotel: es una propuesta integral que conjuga descanso, experiencia y compromiso con el ambiente. Su apertura consolida el crecimiento de un modelo turístico que apuesta por la calidad sin comprometer la biodiversidad de uno de los ecosistemas más valiosos del planeta.

Fuente: Lu17