Tu hotel pequeño lo tiene todo: habitaciones increíbles, WiFi, piscinas y gimnasios. Pero sin un buen desayuno, la experiencia de tu cliente será incompleta, después de todo tus clientes escogen alojamientos pequeños por el trato personal que los distingue.

De hecho, Hoteles.com realizó una encuesta global a miles de viajeros y la mayoría de ellos destacó el desayuno como el servicio que más tienen en cuenta al reservar una habitación. Según Allison Coupe, directora jefe de comunicación global para Hoteles.com, "los viajeros parecen tener una fijación en saber cómo será su próxima comida".

¿Por qué el desayuno es tan importante para los huéspedes?

Un desayuno supone muchas ventajas para los clientes, y no son tan evidentes a los ojos del hotelero. Un buen desayuno facilita y hace más placentera la estancia de tu huésped, mejorando la experiencia global.

Para tus huéspedes esto es lo que significa un buen desayuno en tu propiedad:

Comodidad: tus huéspedes no conocen el área local, y no saben dónde pueden encontrar un buen desayuno. Por lo que tomarlo en tu hotel supone un ahorro de tiempo muy importante.

Listos para empezar el día: no hay nada más cómodo para un huésped que tener el desayuno preparado al empezar su día.

Cercanía: algunos de tus huéspedes no tendrán ganas de salir del hotel, y seguro que prefieren comer ahí si planean relajarse y disfrutar de tus instalaciones.

Disfrutar: en una encuesta realizada por Skift, el 42,4% de los participantes respondieron que el desayuno era el servicio más esperado en un hotel. Al parecer los huéspedes ya están pensando qué desayuno ofrecerás desde el momento que realizan su reserva.

¿Cuáles son las últimas tendencias en desayunos para hoteles pequeños?

Los desayunos son tan populares que cada vez hay más formas de ofrecerlo. Así que, ¿por dónde empezar? Para ayudarte hemos reunido las tendencias de moda para que tu imaginación empiece a volar:

Desayuno mediterráneo: ofrece a tus huéspedes la posibilidad de explorar nuevos sabores por la mañana. No olvides incluir un buen pan, aceite, tomates, embutidos y quesos

Frutas frescas y comida orgánica: para aquellos viajeros que cuidan su dieta. Puedes aprovechar para ofrecer productos locales y que se realizan de forma ecológica y orgánica, como frutas frescas, yogures, panes y otras delicias de tu localidad.

English Breakfast: o desayuno inglés. Judías, bacon, tostadas, huevos... quizás no es la opción más saludable, pero tus huéspedes internacionales darán por sentado que se incluye en tu carta.

Yogur: el último grito son los yogures, ofrece diferentes variedades (griego, con frutas, natural...) y complementos como miel, fresas, muesli, granola o frutos secos.

Puedes servir el desayuno de muchas formas, desde organizar un bufet hasta ofrecer un menú y servicio de habitaciones. Todo depende de cómo quieras orientar tu hotel, y qué es lo que mejor se adapta a tus huéspedes.

Si tu hotel no dispone de las instalaciones y equipo de cocina necesarios, puedes empezar una colaboración con un café o panadería local.

Si buscas opciones de desayuno más genérica, este artículo en El País te puede dar ideas de qué es lo que esperan los huéspedes dependiendo de su estado de ánimo.

¿Cómo puedes transformar tus desayunos en ingresos extras?

Los desayunos no son únicamente una ventaja para tus huéspedes, también son una herramienta para aumentar los ingresos de tu propiedad pequeña. Puedes crear una opción de desayuno (¡y desayuno en la cama!) como suplemento y promocionarlo como un pack especial durante el proceso de reserva

Fuente: Little Hotelier