Estadísticas recientes confirman que los huéspedes eligen un hotel, independientemente del motivo de viaje, turismo o negocios, según las instalaciones de spa ofrecidas. Esto conlleva a que los establecimientos hoteleros renueven sus instalaciones de bienestar con todos los servicios demandados por los huéspedes e incluso, las propiedades que aún no cuentan con un spa, lo incorporen dentro de las amenidades ofrecidas. Ecuación directamente proporcional al crecimiento de la competencia. La pregunta es entonces ¿Cómo diferenciarnos en un mercado cada vez más competitivo?

Si bien en los años que llevamos desarrollando este tipo de negocios con la consultora, hemos probado que son varios los factores que hacen al éxito de un spa o centro de bienestar, el desarrollo conceptual del lugar es el punto clave para posicionarse y ganar terreno ante un mercado en crecimiento y cada vez más competitivo.

Para que el concepto del spa creado o por crear, sea atractivo para sus potenciales clientes, debe cumplir con los siguientes parámetros:

• Ser completamente diferente al concepto planteado por la competencia;
• Encontrarse en línea con el concepto del hotel;
• Contar una historia anticipando la experiencia que vivirán quienes los visiten;
• Englobar los servicios ofrecidos;
• Crear un estilo único marcando tendencia;
• Encontrarse en línea con el entorno.

¨El concepto hace referencia a la identidad del spa. Plasma la filosofía de la empresa, cómo es el spa, cuáles son sus características que lo distinguen de su competencia ?

Si bien parece una tarea sencilla, el desarrollo conceptual es parte de un proceso integral y constituye la fase del plan de negocios que sucede al estudio de mercado. Es fundamental además, que esta parte del plan se ejecute implementando las herramientas necesarias para recabar la información desprendida del análisis SWOT/FODA (fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas) logrando así un mayor acierto en la definición del concepto del spa y contribuyendo al correcto posicionamiento del mismo.

El concepto del spa debe aplicarse en todos los ámbitos del mismo y reflejarse en:

• El menú de servicios
• Las secuencias de servicio
• Las políticas y procedimientos
• Las herramienta de comunicación (interna y externa)
• El diseño y la ambientación

Al determinar el concepto del spa, estamos determinando su misión, visión y valores del spa, que en conjunto, determinan su identidad, la cultura organizativa del spa.