Argentina
29 de octubre de 2021
Se trata de un término que comenzó a utilizarse en Estados Unidos y el Reino Unido a comienzos de los años 80 para referirse a un tipo de hotel pequeño, con un estilo decorativo muy característico y con un gusto por mantener el patrimonio y la riqueza cultural de la ciudad. Actualmente estas boutiques comienzan a estar muy de moda entre muchos sectores de la población. ¿Quieres conocer más acerca de qué es un hotel boutique? ¡Te lo mostramos!
Un hotel boutique es un pequeño hotel creado a partir de un edifico antiguo que ha sido sometido a una reforma y que se ha terminado convirtiendo en un alojamiento para turistas. El exterior de un hotel boutique se caracteriza por mantener una estética similar a la que antiguamente lucía la fachada del edificio, consiguiendo así que prolongue aún más la estética durante mucho más del tiempo.
Lejos de la realidad, la fachada y su interior poco tiene que ver con un edificio antiguo. Aunque, como hemos dicho, sí que se trata de mantener la estética del mismo, su interior se encuentra reformado por completo, además de estar dotado con una decoración moderna y de toda la tecnología que puede tener un hotel tradicional.
Estas boutiques logran que los huéspedes se sientan como en casa. Esta sensación se consigue creando ambientes muy acogedores en todas las zonas de la boutique. Su estilo decorativo, su iluminación y, sobre todo, su tamaño recuerdan más cualquiera de nuestros hogares que a un hotel.
El tipo de huéspedes que acuden a este tipo de hoteles lo hace buscando exclusividad. Una exclusividad que se consigue gracias a la ubicación de la boutique, el ambiente que se respira en el edificio y la exquisitez en su decoración interior.
Aunque estas boutiques suelen estar ubicadas en zonas históricas de muchas ciudades, algunas de ellas también se encuentran en barrios urbanos de la periferia, lo que hace que muchos turistas tengan también la opción de hospedarse en zonas diferentes de la ciudad, y no solo en el centro de la misma.
La gran diferencia entre una boutique y una gran cadena hotelera está en que estas boutiques ofrecen una mayor privacidad, además de un ambiente mucho más acogedor y una atención más personalizada y exclusiva.
Aunque a simple vista pueda parecer que la diferencia entre estos dos tipos de alojamientos se encuentra principalmente en el tamaño y en la estética, cabe destacar que las boutiques, a pesar del tamaño, suelen estar muy preparados para ofrecer cualquier servicio. Quizás es una cuestión de tamaño lo que permite a estas poder llevar a cabo una atención mucho más personalizada y única que las que ofrece una gran cadena hotelera.
Sin embargo, hay que señalar que la mayor parte de estas boutiques no cuentan con servicios como zona de piscina, pista de pádel o tenis, jacuzzi o gimnasio. Algo que sí está presente en muchos hoteles.
Una de las características por las que destaca una boutique, como hemos comentado anteriormente, es su tamaño. El espacio de estos alojamientos suele ser muy compacto, con alrededor de 5 a 50 habitaciones y en la que pueden hospedarse un número no muy elevado de huéspedes. De esta forma, la intimidad y la privacidad están más que aseguradas.
El diseño y la decoración de cada una de estas boutiques las hace únicas y les otorgan una fuerte personalidad. Gran parte de estos alojamientos centran su decoración en una temática en concreto, por lo que es muy común encontrar todo tipo de mobiliario industrial o mobiliario vintage, dos de las colecciones más usadas en la decoración de boutiques.
Como hemos comentado en párrafos anteriores, estás boutiques se encuentran ubicada en zonas céntricas de muchas ciudades, aunque desde no hace mucho tiempo están comenzando a extenderse a los barrios de moda de cada ciudad.
Con esta expansión se consigue ampliar la oferta a una mayor y más heterogéneo grupo de personas.
Mientras que el estilo de un hotel es mucho más formal, estas boutiques tienen un estilo diferente. Un espíritu informal, joven, divertido y urbano, diferente al que estamos acostumbrados a ver en grandes cadenas hoteleras.
El hecho de que muchos de estos alojamientos se encuentren en edificios céntricos antiguos y, gracias a la conservación de una gran cantidad de elementos decorativos que existían en el anterior edificio, se consigue un ambiente mucho más natural y se absorbe gran parte de la cultura de la ciudad.
Al tratarse de un pequeño alojamiento, su servicio es exclusivo y altamente personalizado para todo tipo de huéspedes.
La clientela de las boutiques depende en gran medida del estilo de cada una de ellas. En general, la clientela que suele hospedarse en alguno de estos hoteles comparten un estilo muy particular con la boutique y suelen tener una gran afinidad con el estilo que refleja la misma.
Y tú, ¿Te has hospedado en alguno de estos alojamientos? ¿Qué es lo que más te ha llamado la atención con respecto a la decoración o el tipo de mobiliario?