La palabra lounge puede tener varios significados. Por un lado, encontramos el lounge como género musical: una variación principalmente del jazz que apareció en la década de los 50 y que se caracteriza por ser un tipo de música relajante, perfecta para ambientar y acompañar reuniones sociales. Por otro lado, el término lounge podemos traducirlo técnicamente al castellano como vestíbulo o salón de descanso. Y es de este significado del que queremos hablar en el post de hoy. ¿Quieres saber más acerca de qué es el lounge bar de un hotel?  

Si fusionamos ambos significados, encontramos un nuevo concepto que, junto con un servicio de restauración, nos invita a encuentros sociales, a la desconexión y a la dispersión. Es un lugar perfecto para un “afterwork”, para reuniones de trabajo más casuales, o para cualquier encuentro entre amigos y familiares en un ambiente más relajado. 

En los últimos años hemos podido encontrar este tipo de espacios mayormente en bares y restaurantes, también en bodas, eventos sociales e incluso como decoración en hogares. Sin embargo, los hoteles también han apostado por crear este tipo de espacios y, sin lugar a dudas, es una apuesta segura. 

No solamente consigue atraer a los propios huéspedes, sino que cualquier persona puede disfrutar del lounge bar y hacer de tu hotel un lugar de referencia. 

¿Qué no debe faltar en el lounge bar del hotel?

Producto, servicio y entorno son pilares sobre los que crear un local de éxito. En este post no encontrarás consejos útiles de cómo dar un buen servicio, pero sí te ayudaremos a crear un espacio interior atractivo. 

Mobiliario cómodo y de calidad

A través de la decoración y el mobiliario, debes tener muy claro qué tipo de imagen quieres transmitir a tus clientes. Personalmente, en este caso te aconsejamos que prime el descanso y la tranquilidad. Ha de ser un lugar donde tus huéspedes se encuentren totalmente relajados. 

Además, en los tiempos de pandemia que corren, debes tener en cuenta la normativa vigente en cuanto a la distancia de seguridad entre mesas y sillas, por lo que será clave aprovechar al máximo el espacio que tengas disponible con unos muebles prácticos que te permitan jugar con la distancia. Un estilo minimalista quizás juegue a tu favor. 

Queremos hacer hincapié en la importancia de elegir el mobiliario para hotel adecuado. Te interesa que los clientes de tu hotel estén cómodos y pasen aquí el mayor tiempo posible. 

El diseño y color pueden ser primordiales, pero también lo son los materiales de los que estén fabricados. Buscaremos un material que sea práctico, impermeable, o que al menos en el que las manchas sean fáciles de tratar.  

Un lounge bar no tiene porqué ser exclusivamente un sitio de cafés y copas. Por ejemplo, puede ser que quieras ofrecer servicio de comida, de aperitivo, un picoteo, aunque no sea un restaurante propiamente dicho. Por este motivo, el mobiliario que elijas debería estar pensado para esto. 

Puedes jugar con diferentes tipos de muebles, de altura y de diseño. En un mismo lugar, puedes crear ambientes diferentes: zona de barra y de mesas altas con taburetes acolchados, mesas bajas con sillones, sofás o puffs. Los puffs no son una alternativa a las sillas, sofás o sillones, pero es un mueble que se complementa de manera perfecta con todos ellos. Si no habías pensado en ellos, es hora de que los tengas en mente. 

Un pilar fundamental del lounge bar: la iluminación

La iluminación del lounge bar es un aspecto fundamental. Si tienes la oportunidad de tener luz natural será perfecta durante el día, si no es así, te aconsejamos que apuestes por una iluminación tenue e indirecta, proyectándola hacia las paredes o el suelo.  

Existen infinitas formas, modelos y tipos de iluminación, que además pueden dar un toque muy original a la decoración. 

Las velas o pequeñas lámparas en las mesas crean un ambiente muy especial y acogedor, así como las guirnaldas luminosas, o las lámparas colgantes. 

La buena música, fundamental

Tal y como mencionamos al principio del post, la música va a ser determinante en un lounge bar. Sin lugar a dudas, debe ser una música tranquila (podemos elegir un estilo jazz, chill out, o apostar por versiones acústicas) y no debe estar muy alta, ya que lo más importante es que nuestros clientes puedan entablar una conversación tranquilamente mientras se toman un café, una copa o un aperitivo sin tener que elevar la voz y sin escuchar unos a otros.