Situado en la avenida central de Moscú, Tverskaya, y con una impresionante vista al Kremlin, sus jardines y la plaza Roja, el hotel usa ahora un nuevo logotipo y una nueva página web, pero no se anunció ninguna transacción financiera.

El establecimiento funcionará "como hotel independiente", según un comunicado citado por las agencias rusas. Hasta ahora, estaba gestionado por el Ritz-Carlton Hotel Company, filial del Grupo Marriott.

En marzo, el gigante de la hotelería cerró sus oficinas y suspendió sus nuevos proyectos a raíz de la ofensiva en Ucrania. El 3 de junio anunció además que suspendía todas sus operaciones en el mercado ruso, ya que era "imposible" funcionar por las "restricciones anunciadas por Estados Unidos, Reino Unido y la UE" en los últimos meses para castigar a Rusia.

La salida de Marriott se suma a una larga lista de empresas occidentales que salieron de Rusia tras la ofensiva en Ucrania el 24 de febrero. Entre ellos figuran McDonald's, Coca-Cola, Nike, Starbucks o Renault.

Las consecuencias de las sanciones a Rusia aún son difíciles de evaluar, pero algunos sectores que emplean a cientos de miles de rusos ya se ven afectados por graves problemas logísticos y financieros.

Rusia, por su parte, considera que el país resiste a las sanciones.

Fuente: Infobae