Hoy en día, la industria hotelera busca nuevas y mejores experiencias para sus huéspedes. Si eres dueño de un hotel, es importante considerar la renovación como una manera de estar a la vanguardia para atraer turistas que buscan precisamente nuevas formas de disfrutar de sus viajes.

Así como existe la preocupación por ofrecer un servicio de primer nivel, es fundamental plantear la renovación del hotel para distinguirse de la competencia y aumentar la ocupación a lo largo del año.

Descubre cómo saber si tu hotel necesita una renovación: averígualo y determina la mejor forma de ajustar y refrescar tu marca hotelera.

Realiza una encuesta
Con el paso del tiempo, la cotidianidad impide que notemos los detalles que podrían mejorar el desempeño de nuestro hotel. Para ofrecer una experiencia de viaje diferente a la tradicional, es necesario sorprender a los huéspedes y la mejor manera de hacerlo es conociéndolos de cerca mediante una pequeña encuesta. Descubre sus preferencias invitándolos a responder algunas preguntas sobre las cosas que les gustaron y cuáles cambiarían para disfrutar al máximo. Conforme recibas sus respuestas, es importante priorizar aquellas peticiones que más respondan a sus gusto.  

La regla de oro
En hotelería, existe una regla muy aludida que considera hacer cambios en accesorios, textiles o equipos pequeños cada tres o cinco años; mientras que entre los siete y 10 años es fundamental iniciar un proceso de remodelación profundo que refleje la capacidad de innovación del hotel, así como su aptitud para adecuarse a las nuevas tendencias y a las necesidades de sus clientes.

En ambos casos, recuerda que mejorar la experiencia del cliente no equivale a sustituir los tapetes o las toallas del hotel: estos cambios tienen que ver con el mantenimiento natural que el hotel requiere a lo largo del año.  

Responde las siguientes preguntas  
Antes de dar el paso definitivo, date el tiempo de meditar y analizar si tu hotel es candidato a una remodelación respondiendo este cuestionario:

• ¿El desempeño y prestigio del hotel es mejor o peor que el de la marca que compites?
• ¿Qué revelan las encuestas de satisfacción de tus clientes?
• ¿Qué ocurriría con el crecimiento del hotel si no se realiza una renovación próximamente?
• ¿Las expectativas económicas son alentadoras a mediano y largo plazo?

Después de responder estas preguntas, será mucho más fácil determinar la urgencia o no de la renovación de tu hotel. En caso afirmativo, recuerda que vivimos una época de grandes cambios y que las tendencias van y vienen de manera impredecible, cada vez en lapsos de tiempo más breves.

Debido a estas circunstancias, una renovación involucra reflexionar profundamente sobre las preferencias de los huéspedes, siempre considerando que una remodelación exitosa depende de un diseño que permanezca vigente durante al menos los próximos 5 a 10 años.

La experiencia en hotelería determina que un trabajo excelente es cuando inviertes en cambios que los clientes notan y aplauden, aún si no saben exactamente cuál o cuáles fueron los cambios que se hicieron.

Todos los huéspedes disfrutan ser escuchados y valorados como se debe. Así que escuchar, analizar y entender lo que tienen que decir es decisivo para enriquecer tu hotel y convertirlo en un espacio que deleite los cinco sentidos, detonando una experiencia de 360 grados que haga de cada viaje una postal única e inolvidable