General
Proponen un mix entre el Estado y privados para su restauración; el Gobierno nacional los había considerado "innecesarios"
30 de junio de 2025
Un mix de participación estatal e inversiones privadas se propone como primera alternativa para el futuro del complejo de hoteles de Chapadmalal, un conjunto edilicio que es propiedad del Estado nacional, monumento histórico desde 2013 y, en los últimos tiempos, un enorme problema a resolver por la falta de recursos para mantener esas construcciones que datan de comienzos de la década del 50.
La idea asoma luego de una última temporada en la que esa unidad tuvo mínimo funcionamiento, con uno de los nueve hoteles que la componen, y cuando el Gobierno nacional acaba de considerarlos "innecesarios" bajo su órbita, por lo que abrió camino a un destino sin recursos públicos para su mantenimiento.
El complejo hotelero visto desde el aire
La novedad se conoció a comienzos de abril y dos meses después circula esta primera iniciativa que invita a debatir el futuro de un espacio estratégico para este distrito, con excelentes playas, amplia superficie verde, una ruta que lo atraviesa y un desarrollo inmobiliario que desde Chapadmalal e inmediaciones empieza a rodearlo.
"Redescubrir el mar. Recuperar el patrimonio. Reactivar el futuro", se plantea casi como eslogan y mucho más como rumbo a seguir en este proyecto que puso en escena Emiliano Giri, presidente del PRO en General Pueyrredon y ex presidente del Ente Municipal de Turismo (Emtur), hace una década.
Render hecho con inteligencia artificial de quienes lideran el proyecto
El complejo de hoteles de Chapadmalal tiene nueve edificios repartidos en una superficie de más de 75 hectáreas, ubicados a un lado y otro de la ruta 11 pero con una ubicación privilegiada con esa salida a un frente de playas agrestes, muy bien valoradas por quienes gustan alejarse de las grandes concentraciones urbanas de temporada y mejor calificadas todavía los surfers, que disfrutan allí de uno de los mejores escenarios para su deporte.
Construidos a fines de la década del 40 con objetivo de fomentar el turismo social, afrontan las últimas décadas flojos de mantenimiento. Las restauraciones han sido parciales y en varios casos quedaron incompletas, hasta el punto de de mantener algunos de esos edificios inutilizables para los fines para los que fueron creados.
Este último verano tuvieron un funcionamiento restringido, con una nueva modalidad dispuesta por el actual Gobierno nacional: se pagaba una tarifa por encima del histórico pero aun así accesible, con alojamiento y comidas. La experiencia piloto, con un concesionario privado, tuvo buena recepción confirmada por el alto nivel de ocupación que se logró en temporada alta.
Una locomotora de crecimiento
"Hay que pensar el lugar como un todo, que sea una locomotora de crecimiento para la zona y la ciudad", destacó Giri a LA NACION y planteó la posibilidad que lo que hoy es manejo exclusivo del Estado, para el cual es un costo muy alto y la actual gestión ya dio señales claras de no asumirlo con arcas públicas, pueda tener un nuevo y más venturoso futuro con un mix en combinación con el sector privado.
El complejo de hoteles de Chapadmalal tiene nueve edificios
El modelo propuesto como esta primera alternativa es la de una sociedad anónima con participación estatal mayoritaria y que tiene como espejo y principal ejemplo el formato con el que se encaró, hace más de 30 años, la transformación de Puerto Madero, en Capital Federal.
En el proyecto para este caso se propone entonces la formación de la Corporación Urbanística Chapadmalal S.A, integrada por el Estado nacional como titular del inmueble y municipio de General Pueyrredon y sector privado como socios estratégicos para poner en valor el lugar.
El predio tiene una extensión de más de 75 hectáreas
Desde esa figura se avanzaría con planificación, desarrollo, administración, concesión y comercialización del proyecto. Según el detalle de la propuesta a la que accedió LA NACION, funcionaría con un consejo de administración con "representación mixta y estándares de transparencia y eficiencia".
"Puerto Madero era un lugar degradado, con privilegiada ubicación, y en las últimas décadas es parte de la transformación urbana de la Capital Federal", dice Giri a LA NACION y refiere a ese paseo metropolitano como "un activo que tiene viviendas, universidades y comercio".
Por eso apunta a tomar ese modelo y avanzar con un masterplan para que también en Chapadmalal se pueda intervenir de tal manera que, desde una participación compartida de Estado y particulares, se busque la mejor salida para el lugar.
Bajo la órbita de la AABE
El complejo de hoteles turísticos de Chapadmalal estaba bajo la órbita de la hoy Secretaría de Turismo, Deportes y Ambiente, que conduce Daniel Scioli. Desde esas oficinas se declaró la "innecesariedad" de esta unidad y de otra similar de Embalse Río Tercero, en Córdoba, que también nació y funcionó durante décadas como centro de turismo social bajo el ala del Estado nacional. Así se decidió y concretó en abril pasado la transferencia de ambos a manos de Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE). Es el organismo que define destino de inmuebles estatales.
Uno de los renders que presentó la corporación urbanística Chapadmalal
Entre los fundamentos Scioli mencionó planteos que atribuyó a la Federación Empresaria Hotelera Gastronómica de la República Argentina (Fehgra), por una supuesta competencia desigual que representaría este complejo frente al alojamiento comercial privado.
Con esta resolución han quedado cerrados, sin servicios de hotelería proyectados. Y la AABE deberá determinar qué destino les da. En ese proceso de transferencia de un organismo a otro se decidieron también algunos despidos de personal. La Secretaría de Turismo, Deportes y Ambientes continúa a cargo del mantenimiento de esos espacios, tanto espacios verdes como edificios.
Este complejo edilicio, obra del arquitecto Alejandro Bustillo, está declarado monumento histórico nacional. Su última gran inversión la recibió en vísperas de los Juegos Deportivos Panamericanos de 1995, cuando ofició como residencia de la totalidad de los deportistas y delegaciones que participaron de las competencias.
Desde entonces las intervenciones para mantenerlos fueron esporádicas y el deterioro fue mucho más rápido que las licitaciones para recuperar los edificios. Este último verano se habilitó solo el hotel 2, que se encuentra en óptimas condiciones. Trabajó enero con muy buena ocupación. También estaba disponible el 7, del otro lado de la ruta 11. El resto de las unidades se encuentran entre daños profundos y obras de restauración a mitad de camino, sin presupuesto para continuarlas.
En el extremo norte se encuentra la denominada residencia presidencial. Es un conjunto de bungalows con uno de ellos preparado para el alojamiento y descanso del jefe de Estado de turno o sus invitados.
Render de la Corporación Urbanística Chapadmalal
El proyecto publicado por Giri entiende que a la ubicación en un escenario estratégico, con salida directa al mar, a 25 kilómetros de Mar del Plata y a un paso de un paraje Chapadmalal que no para de crecer en estos últimos años, este conjunto edilicio puede ser "motor de desarrollo" para la zona.
Se piensa en un concurso de ideas para el ordenamiento del lugar pero se anticipa la posibilidad que allí, además de hotelería y turismo, también puedan instalarse universidades, centros deportivos, espacios de coworking, oficinas, espacios comerciales y viviendas particulares multifamiliares, con los correspondientes refuerzos de seguridad y salud. Los renders que hicieron circular exhiben también torres de departamentos.
El proyecto considera que, por su dimensión y proyección en este extremo del distrito, habilitará la extensión de redes de cloacas y gas que hoy son por allí una cuenta pendiente. Más aún con el notable desarrollo inmobiliario que se advierte en los barrios que lo rodean.
"Hay que ver lo que se hizo bien con Puerto Madero y aplicarlo en Chapadmalal para que el nuevo formato genere los recursos para sostener la infraestructura y que apuntale el desarrollo integral de la zona", remarcó Giri.
El plan original que se propone entiende que la participación privada, mediante mecanismos de licitaciones y concesiones, acercará fondos que no solo permitirán la reconversión del lugar sino también los recursos para mantenimiento y restauración patrimonial.
Por Darío Palavecino
Fuente: La Nación